‘Lula’ da Silva busca atraer a todos los brasileños

El electorado brasileño dio a Luiz Inácio Lula da Silva una apretada victoria para convertirse nuevamente en presidente de Brasil.

El presidente electo ganó con el 50.9 por ciento de los votos y el actual presidente, Jair Bolsonaro, recibió el 49.1 por ciento de los votos.

Bolsonaro, este lunes, aún no acepta la derrota y varios camioneros que lo apoyan protestaron por todo el país con bloqueos viales. Jair Bolsonaro, desde antes de los comicios, «auguraba» un fraude electoral, dando a entender que no aceptaría los resultados electorales.

En 2018, que hubo elecciones para presidencia, «Lula» da Silva no participó debido a que estaba en prisión acusado de corrupción. Hace cuatro años Bolsonaro ganó tras una campaña de discursos incendiarios, profundamente conservadores y dudando de las instituciones democráticas.

«Es la victoria de un movimiento democrático que se formó por encima de los partidos políticos, de los intereses personales y de las ideologías para que salga victoriosa la democracia», dijo Luiz Inácio da Silva este domingo tras darse a conocer su victoria electoral.

Lula prometió trascender a su partido y atraer a gente de centro y de derecha. No obstante, la sociedad brasileña se encuentra polarizada.

Bolsonaro, durante esta última campaña, dijo que en caso de que «Lula» ganara, se instauraría el comunismo, legalizaría drogas, permitiría el aborto y perseguiría a las iglesias. El ahora electo, da Silva, no tomó esas medidas en su presidencia de 2003 a 2010.

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